Invierno 1954, documental
El NO-DO (Noticiarios y Documentales), aquel popular noticiero que se proyectaba obligatoriamente en los cines españoles antes de la película entre 1942 y 1981, permite revivir hoy los inviernos de los años 50 en la provincia de León.
Uno de sus reportajes, bajo la música de Manuel Parada y acompañado por la voz de Matías Prats Cañete, recupera parte de la historia vivida por los leoneses de aquella época frente a los temporales de nieve que provocaban "paisajes esteparios".
La cinta (NO-DO nº580A) que narra las mil y una vicisitudes de los responsables de servicio ferroviario para restablecer el paso de los trenes, y hoy conservada en el Archivo Nacional, ofrece imágenes únicas de la provincia de León en el invierno de 1954.
Bajo cinco metros de nieve.
"La intensidad del temporal es de tal magnitud que en algunas comarcas de León, Asturias y Santander más de 400 pueblos han sido borrados por la nieve", se escucha a Matías Prats sobre las imágenes tomadas por Rafael Simancas.
Durante la narración de este nodo se aprecia un León muy alejado de los inviernos actuales, y se dejan ver imágenes de un Villamanín "con cinco metros de nieve", de los trabajos de la "sección de Vía y Obras" ferroviario en auxilio a una máquina descarrilada en Santa Lucía y los dos metros de nieve en Pola de Gordón.
Wow, menudo temporal. El nodo me recuerda a mi niñez.
ResponderEliminarCada vez nieva menos en todas partes. Aquí en Viena hace inviernos que no vemos la nieve (un día al año y desaparece enseguida).
Besos
Encontré el vídeo y me llamó la atención. Pensé que en Viena nevaba más de un día. Qué poco.
EliminarAquí todavía nieva, este año también bastante, pero no tanto como aparece en el vídeo.
Sin embargo, el año anterior la nevada fue espectacular.
Un beso, Celia.
Muy duro el trabajo en esos años, todo ha cambiado.
ResponderEliminarMi hermoso pirineo aregones ya no es el mismo, ni tampoco Teruel, aunque este año en muchos de sus pueblos han tenido nevadas de más de un metro.
Aquí en este ricón del mundo nieva poco y llueve mucho.
El video es espectacular.
Con tu permiso me quedo, Rosa, un abrazo.
Ambar
¡Hola, Ámbar! Si eres del Pirineo aragonés, ya conoces bien la nieve.
EliminarSí, es espectacular, parece increíble, cinco metros de nieve. Ahora, no es así, nieva pero no tanto. El año pasado sí que provocó muchos daños por esta zona.
Me gustó mucho ver lo organizado que estaba el trabajo, muy duro, es cierto.
Me alegro de que te quedes, Ámbar, encantada.
Un beso.
cinco metros!!!!!! , por qué nieva menos ????
ResponderEliminarParece increíble. No sé, se dice que por el cambio climático, pero lo cierto es que nieva menos y no en los meses que solía, ahora se retrasa más. Este año hasta mediados de febrero no apareció, y ya no cuaja igual.
EliminarEn León se nota más, apenas nieva.
Un abrazo, Sinre.
gracias Rosa por tus amables palabra en su espacio, en el mío y en el tuyo.
ResponderEliminarMi cumple fue el día dos y lo de hoy es agradecer todas esas tarjetas y felicitaciones en el blog, facebook, correos y demás.
La vida es como es y hay que llevarla como viene.
Gracias de nuevo mi querida Rosa.
Un abrazo.
Ambar
Gracias a ti, Ámbar.
EliminarSeñal de que la gente te quiere. Eres muy cariñosa.
Sí, hay que llevarla como viene, ni más, ni menos.
Un beso y un abrazo para ti, querida Ámbar.
El "progreso" nos han robado hasta los inviernos.
ResponderEliminarMiedo me da de pensar en el próximo verano.
Besos preocupados.
Debemos cuidar la Tierra, claro que sí.
EliminarEl "progreso" no es siempre progreso de verdad, es cierto ...
No tengas miedo, Toro, ya veremos ... :)
Un beso, Toro.
Cómo recuerdo aquellos años, nevaba como Dios manda, había días que no podías ni llegar al colegio y eso en Madrid. La nieve te llegaba hasta las rodillas, era muy divertido...
ResponderEliminarBesiños, leonesa preferida
¡Holaaaa! Recuerdo algunas nevadas en León, y que el autocar del colegio apenas podía subir la cuesta, se encontraba en un alto. Y todos alborotados, era muy divertido ... y los juegos con las bolas de nieve, los muñecos ...
EliminarA mí me da pena que casi no nieve en León, sobre todo, en Navidad ...
Besiños, madrileña de mi alma.
Y convenientemente repartidos ...
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ResponderEliminarBuenas noches, Rosa:
ResponderEliminar¡Cuánto trabajaba la gente entonces! ¡Y sin ir equipados adecuadamente!
Qué inviernos tan fríos se repetían. Cuánto pensaría José Sánchez Rojas en su madre, a la que él no podía llevar a Madrid en los años 20 y 1930.
¡Estupenda entrada!
Abrazos.
Sí, trabajaban muy bien, con escasos medios. Se nota el esfuerzo, la coordinación.
EliminarTengo que mirar a Sánchez Rojas. Es una asignatura pendiente :)
Un beso, querida Gelu.