"...Y allí arriba, en la soledad de la cumbre, entre los enhiestos y duros peñascos, un silencio divino, un silencio recreador..." (Miguel de Unamuno)


domingo, 24 de diciembre de 2017

Noche de Paz




"La cultura que pierde el sentido del sacrum,
 pierde el sentido por completo".

 Adam Zagajewski







Dios es un gran tímido. Todo cuanto admiramos -los árboles, los animales, el universo- ha brotado de un solo balbuceo. A veces pienso que si hablara la belleza nos moriría. 

Jesús Montiel







¡Feliz Navidad!





miércoles, 6 de diciembre de 2017

La soledad




La soledad desciende como copos de nieve.




No hay amor suficiente para cantar la tierra.


La soledad es pozo interminable y sin agua;
sólo el páramo suena como un cántaro roto.
El silencio del aire choca contra las rocas;
hoy ni siquiera el agua se escucha entre las piedras.
Algún jilguero clava alfileres en los cardos,
en los cardos agrestes va dejando su pico.
Los terrones padecen sus montañas de olvidos,
por los pardos rastrojos esparcen su tristeza.
Ya no queda siquiera la sangre de amapolas,
se fueron con el trigo después de las guadañas.
Las ovejas se arrastran por las lindes del sueño,
los recentales balan mirando las colinas.
Los sapos en la sombra acunan su papada,
como fuelles resoplan al calor de la tarde.
La soledad planea como un ave infinita,
se amarra, como tienda, al palo de los chopos.
El hombre no es capaz de comprender tantas horas,
el hombre desconoce las puertas de la tarde.
Dios muestra su presencia en la total ausencia,
su palabra es tan solo tartamudez sin fin.
Los grillos y las tórtolas compiten en arrullos,
el tambor de los valles resuena en el silencio.
Por el río las aves pían entre las sombras;
sus nidos, ahora, huérfanos, se alejan del verano.
La noche va bajando lentamente hacia el valle,
solamente los chopos sisean sin cesar.
Los barrancos de sombras se cuelgan de las rocas,
la soledad desciende como copos de nieve.
Los montañeros callan cargados de mochilas,
por Valporquero el sol tiene amores de luna.
El agua se derrumba desde los altos montes,
el agua va buscando la placidez del mar.
Ya sólo canta el agua en el fondo del valle,
todas las cosas duermen en lechos de silencio.

Ángel Barja, Salmos de la meseta, 8




lunes, 4 de diciembre de 2017

Soy de una tierra fría






Soy de una tierra fría, pero hermosa.
Aquí la nieve, la esperanza helada
De que se alumbre en cada madrugada
El destino difícil de la rosa.

Antonio Pereira