Armónico murmullo de las hojas
en el aire tranquilo de la tarde,
agudo y leve canto de los pájaros,
pequeñas, palpitantes flechas vivas;
aroma silencioso de las flores,
hondura transparente del crepúsculo.
Escucha, siente, mira, goza, aprende:
todo esto tiene que morir, y canta.
José Cereijo
Simplemente bello. Es precioso el poema... Como la vida misma. Grscias
ResponderEliminarSí, como la vida misma.
Eliminar¡Un beso, Maite!
Precioso Rosa ! Me ha encantado el vídeo y el poema. La naturaleza es un oasis de belleza para admirar.
ResponderEliminarFeliz 2016 !! He estado estos días desconectada totalmente de internet y me estoy poniendo ahora al día con los blogs.
Un Abrazo.
Gracias a ti, R. Montblanc. Sí, es todo un oasis de belleza, estamos rodeados de belleza. Un regalo.
EliminarTambién te deseo un ¡Feliz Año!
Un beso.
Cantemos entonces...
ResponderEliminarBesos.
Sí.
EliminarUn beso, Toro.
Qué bien saben decirlo los poetas.
ResponderEliminarPor eso los demás callamos.
Un fuerte abrazo.
Estoy leyéndote esta tarde y me quedo con todo, poesías, vídeos, música...todo precioso, Rosa, gracias.
Adoremos junto a los Magos.
Se había despistado este comentario.
EliminarEs verdad, qué bien saben decirlo, es un don precioso.
Gracias, querida Caminar, viniendo de ti, es todo un honor. Me alegro mucho de que te guste.
Gracias siempre a ti.
Adoremos.
Un beso, querida amiga.