La tierra estaba seca.
No había ríos ni fuentes.
Y brotó de tus ojos
el agua, toda el agua.
Luis Alberto de Cuenca
Río Torío, entrada a las Hoces de Vegacervera
Los pobres y los necesitados buscan agua y no la hay,
su lengua por la sed está reseca.
Yo, el Señor, los atenderé;
su lengua por la sed está reseca.
Yo, el Señor, los atenderé;
yo, el Dios de Israel, no los abandonaré.
Alumbraré corrientes sobre las crestas,
manantiales en medio de los valles;
convertiré el desierto en estanques,
y la tierra seca en fuentes de agua.
Pondré en el desierto cedros,
acacias, mirtos y olivos;
colocaré en la estepa cipreses,
álamos junto con bojes,
para que vean y conozcan,
adviertan y comprendan a la vez
que la mano del Señor hace esto,
y el Santo de Israel lo crea.
Isaías 41, 17-20
Una preciosidad mi querida Rosa. Hoy la tierra está herida por la insensatez del hombre.
ResponderEliminarMe he quedado en este río, me encanta el agua, su ruido y sus criaturas vivientes.
un abrazo
Sor.Cecilia
¡Hola, sor Cecilia! Me alegro mucho de verte. Es muy bonito el vídeo y el río Torío a su paso por las Hoces es una maravilla contemplarlo. Tienes razón, somos unos insensatos por no cuidar la Naturaleza, somos ¡brutos! Las Hoces están cerca de Villamanín (en Vegacervera), es un lugar espléndido y la foto la hizo mi marido, es bonita ¿verdad?, si quieres, te la llevas, siempre las comparto...
EliminarUn beso, con muchísimo cariño.
Dios siempre estará con los más necesitados, y así debe ser. Precioso Rosa, Feliz Pascua. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana amiga.
ResponderEliminar