Sabiéndolo natural, e irremediable en nosotros, lo aceptamos y celebramos las sorpresas de “otoñocer” un año más. Y -como al mirar la imagen o al escuchar esta canción-, descubrimos la belleza que guarda.
Qué bonito es el otoño, también es mi estación preferida. Y el arce es uno de esos árboles que otoñean especialmente bien, cuídalo mucho. Aunque seguro que ya lo haces. Un beso, Rosa.
Otoñocer, otoñocer, otoñocer ... Aún es pequeño el arce rojo, pero ya se nota la diferencia con el de hojas verdes, son muy resistentes y crecen rápido ... Sí, los cuido todo lo que puedo cuando estamos aquí, me encantan los árboles ...
Mi infancia transcurrió frente a un gran jardín de plátanos, otoñecía con el cambio de color de las hojas de los árboles. El suelo era una gran cama de hojas en la que los niños retozaban. Sigo pasando a diario por allí, nada es lo mismo. Ahora podan los árboles antes de la caída de las hojas para no tener que recogerlas del suelo. A los niños de mi pueblo las autoridades le robaron una estación con la que soñar.
Si te digo que he ido al diccionario a mirar la palabra 'otoñecer' al leerte, y no se encuentra. Otoñocer/otoñecer, parece que se admiten ambas acepciones, por lo que he mirado.
Qué bonito lo que cuentas de tu infancia y las hojas para retozar. Sí, creo que sí les han robado una estación. La mía transcurrió en la ciudad, pero la mayoría de los días, íbamos a jugar al patio de una de mis abuelas, era un patio grande, con árboles y rosales. Los fines de semana, salíamos al campo, cuando comenzaba el buen tiempo. Mi madre nos enseñó el nombre de las plantas, nos llevaba con ella, todos al lado, caminábamos y caminábamos ... aprendí a distinguir el té, el orégano, el tomillo, la sanguinaria, la hierbabuena ... lo que aprendemos de niños, qué importante es ¿verdad? Nunca se olvida.
Un beso, me gusta verte aquí. Gracias, por este recuerdo de tu infancia.
En nuestro árbol de la vida recibimos tidas las primaveras, otoños y las estaciones de todos los tiempos. Por esa hermosa sierra luego llega la nieve, eso si es que ya no ha aparecido. Un abrazo. Ambar
Cuando el hombre se separa de la naturaleza se hace preguntas.
ResponderEliminarPrecioso conjunto Rosa, gracias por traernos tanta belleza.
Un beso natural.
Sí, es cierto, y en ella también.
EliminarCreo que voy a otoñozar en un arce.
:)
Gracias, Minimal.
Un beso natural también para ti.
¡Qué belleza, Rosa!
ResponderEliminarMe encanta.
Otoñoceo.
y la música... Preciosa.
Gracias
Jajaja, también otoñoceo, qué palabra tan bonita ¿verdad?
EliminarUn beso, Maite.
Gracias.
:)
Qué bonitos son los colores del otoño.
ResponderEliminarBesos.
:)
EliminarTenemos un arce rojo, todavía es pequeño, pero una preciosidad ...
Es mi estación favorita.
Un beso, Celia.
Buenas noches, Rosa:
ResponderEliminarSabiéndolo natural, e irremediable en nosotros, lo aceptamos y celebramos las sorpresas de “otoñocer” un año más.
Y -como al mirar la imagen o al escuchar esta canción-, descubrimos la belleza que guarda.
Abrazos
Buena noches, Gelu:
Eliminar:)
Sí, "otoñocer", ¡qué fallo!
¡Gracias, Gelu!
¡Un beso!!!
Me encanta. Suerte que otoñecéis. Aquí aún veraneamos, ya se hace largo.
ResponderEliminarAquí, ya comienza a notarse ... este año, hasta hoy, también parecía verano ...
EliminarUn besazo.
Qué bonito es el otoño, también es mi estación preferida. Y el arce es uno de esos árboles que otoñean especialmente bien, cuídalo mucho. Aunque seguro que ya lo haces.
ResponderEliminarUn beso, Rosa.
Otoñocer, otoñocer, otoñocer ...
EliminarAún es pequeño el arce rojo, pero ya se nota la diferencia con el de hojas verdes, son muy resistentes y crecen rápido ...
Sí, los cuido todo lo que puedo cuando estamos aquí, me encantan los árboles ...
Un beso, Paloma.
Mi infancia transcurrió frente a un gran jardín de plátanos, otoñecía con el cambio de color de las hojas de los árboles. El suelo era una gran cama de hojas en la que los niños retozaban. Sigo pasando a diario por allí, nada es lo mismo. Ahora podan los árboles antes de la caída de las hojas para no tener que recogerlas del suelo. A los niños de mi pueblo las autoridades le robaron una estación con la que soñar.
ResponderEliminarSi te digo que he ido al diccionario a mirar la palabra 'otoñecer' al leerte, y no se encuentra. Otoñocer/otoñecer, parece que se admiten ambas acepciones, por lo que he mirado.
EliminarQué bonito lo que cuentas de tu infancia y las hojas para retozar. Sí, creo que sí les han robado una estación.
La mía transcurrió en la ciudad, pero la mayoría de los días, íbamos a jugar al patio de una de mis abuelas, era un patio grande, con árboles y rosales. Los fines de semana, salíamos al campo, cuando comenzaba el buen tiempo. Mi madre nos enseñó el nombre de las plantas, nos llevaba con ella, todos al lado, caminábamos y caminábamos ... aprendí a distinguir el té, el orégano, el tomillo, la sanguinaria, la hierbabuena ... lo que aprendemos de niños, qué importante es ¿verdad? Nunca se olvida.
Un beso, me gusta verte aquí.
Gracias, por este recuerdo de tu infancia.
En nuestro árbol de la vida recibimos tidas las primaveras, otoños y las estaciones de todos los tiempos.
ResponderEliminarPor esa hermosa sierra luego llega la nieve, eso si es que ya no ha aparecido.
Un abrazo.
Ambar
Sí, querida Ámbar, es un continuo descubrimiento.
EliminarYa ha llegado la nieve, este año ha aparecido en su época, no se ha retrasado.
Muchos besos y un abrazo.